Caliche, del arraigo pampino al pionero musical
Por Ory González F. y Sullyn Lay P. / Fotos: archivo.
El origen de Cancionero Pampino tiene un responsable directo y su nombre es Freddy Albarracín, conocido bajo el nombre artístico de Calatambo. “Qala, en aimara es piedra, entonces es un tambo de piedra”, nos aclara el cultor de música tradicional, Mauricio Novoa.
Es marzo de 2013 y con algunos miembros del futuro equipo de GuayabaStone emprendemos un viaje al interior de la región, específicamente al Salar del Huasco.
Pese a las advertencias, nos decidimos a llegar hasta el salar por Alto Pica, ruta que en algún momento del viaje nos hizo recordar las múltiples advertencias que recibimos. Sin embargo, tuvimos solo una precaución musical, conseguirnos un cassette, resistente a los saltos del camino, a diferencia de los cd’s.
A medio andar por los parlantes de la camioneta comenzaron a salir melodías de la zona, cuecas de las naranjas matillanas, invitaciones a brindar con vino por el amor de la oficina, hasta que apareció la popular cueca Caliche. Nos impresionó enormemente encontrarnos con estos sonidos y canciones; y sobre todo sentimos un deber moral de contarles a las nuevas generaciones sobre este músico que tiene un asiento preferencial, estilo marquesina en la historia de la música popular tarapaqueña.
Al llegar a Iquique comenzamos a averiguar con distintas personas que a nuestro entendimiento conocían el folclor tradicional y el resultado fue 3 a 2, a favor de que Calatambo Albarracín estaba con vida. Teníamos ante nosotros un misterio, que finalmente logramos dilucidar cuando lo encontramos en Santiago, en su casa, ubicada en Las Rejas sur.
Pionero
Calatambo Albarracín
Freddy “Calatambo” Albarracín, nació el 21 de septiembre de 1924 en la oficina salitrera La Palma. Hablar de él, es hablar de un músico de instinto migratorio, que fue capaz de tomar la música que sonaba en el interior de la región y por primera vez difundirla en la capital. Así podemos decir que es uno de los primeros compositores y divulgadores de la música folclórica del norte chileno. Poseedor de un sentido del espectáculo como pocos, supo popularizar y fortalecer estos ritmos pampinos.
“Calatambo abre una tremenda escena para la música de región en el contexto nacional, porque después de él empiezan a surgir otras personas que se atreven a hacer lo mismo, pero antes de Calatambo no había registro de personas que hayan viajado como él y hayan tenido el impacto que él tuvo con la música de esta zona”, comenta el cultor de música tradicional, Mauricio Novoa.
Calatambo Albarracín llegó a comienzos de los años 50 a Santiago y comenzó a divulgar ritmos e instrumentos nortinos como las quenas, zampoñas y lichiguayas entre otros. Con su agrupación, Los Calicheros de Sierra Pampa, llegaron a actuar en el Teatro Ópera y grabaron discos con cuecas calicheras, cachimbos, trotes y melodías pampinas.
Y así, fue ganando terreno y reconocimiento. Las radios de esos años transmitían sus canciones “Camanchaca”, “Adiós Salitrera Victoria” , “Cueca a San Lorenzo”, “La Tirana Chica”, “Trote tarapaqueño” y su más conocida creación “Caliche”, canción que hasta el día de hoy se enseña en las escuelas de nuestro país.
Parafraseando las palabras de Calatambo, la cueca “Caliche”, está inspirada en el sentimiento y cariño del nortino por la tierra que lo vio nacer, matizando en esta canción la materia prima del salitre -que es el caliche- y la alegría que siente el nortino cuando está de fiesta.
Calatambo (Registro GuayabaStone, noviembre 2013)
Mauricio Novoa, enfatiza “Calatambo está situado en un momento en que las personas no se preguntaban mucho el qué o el cómo hacían música, porque era una necesidad fundamental de su vida… Sus letras tienen que ver con esta experiencia viva, a Calatambo es imposible separarlo de esa vivencia, es imposible separarlo de ese paisaje”.
Al igual que otros grandes de la música chilena como Palmenia Pizarro, Buddy Richard, Germaín de la Fuente y Tito Fernández, Calatambo en 2012, obtuvo la investidura de figura fundamental de la música chilena, otorgada por la Sociedad Chilena del Derecho de Autor (SCD).
GuayabaStone, a través de su Cancionero Pampino quiso homenajear al gran Calatambo Albarracín con una versión de “Caliche” a cargo de la banda Salomónico Trío, quienes a través de su bajista, Manuel Barahona, nos cuentan “para llegar al proceso creativo fue difícil, porque esta canción está en el inconsciente colectivo popular en el norte, lo bailan en los colegios y en las fiestas patronales, entonces era un gran desafío”.
Acá te dejamos el resultado.
